Una de las especies más hermosas y resistentes, y por lo tanto más aconsejables para introducirse en el mundo de la acuariofilia, es el betta splendens, también conocido como luchador o combatiente de Siam. Los machos de esta especie de origen asiático son tremendamente espectaculares, con largas aletas de vibrantes colores. Pacíficos con otras especies, se caracterizan por ser muy agresivos con los machos de su misma especie. Las hembras, más discretas, pueden convivir en grupo aunque también establecerán sus jerarquías. Miden unos seis centímetros, viven como mucho unos dos años y precisan de una temperatura de entre 23 y 28 grados. Son omnívoros, por lo que conviene variar su dieta ofreciéndoles escamas, larvas rojas de mosquito, artemia... Gustan de acuarios bien poblados de plantas, no muy altos y con un filtrado poco agresivo. Un macho de esta especie en un acuario de unos quince litros (mínimo) con alguna planta natural es una buena manera de iniciarse en esta afición además de contar con un hermoso lugar al que dirigir la vista.Más información sobre bettas en particular, y acuariofilia en general, en Doctor Pez.
De la mano de la primavera, comienza la época más propicia para los largos paseos con perro. El reverso de la moneda es que los canes tienen una de sus mudas anuales y comienzan a abundar esos molestos parásitos que hacen peligrar la salud de nuestra mascota. Sin duda, los más peligrosos son los mosquitos. Las hembras son responsables de enfermedades como la leishmaniosis.
Quiere tener un perro, pues pregúntese antes si un gato se adaptaría mejor a su estilo de vida. Desea un gato como compañía, pues plantéese si un perro cubriría mejor sus necesidades. Si gusta de dar largos paseos, pasa mucho tiempo en casa y le viene bien salir a la calle a relacionarse, sin duda un can sería la mascota perfecta. Pero en cambio si está mucho tiempo fuera de casa, ausentándose con frecuencia incluso varios días, si sus horarios son caóticos y por nada del mundo se levantaría temprano un sábado, opte sin duda por un minino. Olvídese de prejuicios impuestos, ni los gatos son traicioneros ni los perros tienen porqué ser un problema en vacaciones (hay una gran oferta de residencias caninas). Y si lo desea, tampoco hay impedimento para tener un animal de cada especie.
Son animales muy limpios, pero eso no quiere decir que haya que descuidar su higiene. Los gatos de pelo largo requieren muchos más cuidados que los de pelo corto. Conviene tomarse muy en serio los cepillados a menos que queramos tener una bola de pelo andante y nos veamos obligados a llevarlo al veterinario para que le someta a un corte de pelo drástico. Con los gatos de pelo corto la cosa es muy distinta. Ellos se suelen bastar para tener el pelaje perfecto, aunque nunca está de más eliminar el pelo muerto mediante cepillados, que además servirán para mejorar la relación con el animal y evitar que ingiera demasiado pelo. Lo que sí hay que vigilar con frecuencia y limpiar si es necesario son las orejas y ojos. También en este caso las razas más chatas, como persas y exóticos, tienden a lagrimear y mancharse con más frecuencia. Tampoco es mala idea acostumbrar al minino desde pequeño a dejarse examinar y cortar las uñas. Por último, los baños son necesario sólo en caso de extrema necesidad. Nunca se debe abusar de ellos. Y nunca debe emplearse jabón o champú para humanos.
Ya tenemos encima la Semana Santa. Una época estupenda para los que pueden irse de viaje, pero que hace temblar las canillas a las asociaciones de protección animal.