6.9.04

El dulce y pacífico galgo

Resulta extremadamente raro ver en nuestras ciudades un galgo español paseando a la vera de su dueño. Y es que pocos imaginan que estos elegantes canes son unas mascotas excelentes. Dormilones, muy saludables, poco ladradores, con un carácter muy dulce y pacífico, se adaptan perfectamente a la vida en un piso y su pelo corto y apretado apenas requiere cuidados. Pero estos perros tan aristocráticos lo suelen pasar fatal. Todo por culpa de cazadores con pocos escrúpulos y escasa paciencia para aquellos ejemplares que ya no son capaces de correr como el viento, algo que suele suceder cuando aún son muy jóvenes.

Adopción. En casi todas las perreras y protectoras de España (sobre todo las de las dos Castillas, Madrid, Extremadura y Andalucía) es fácil encontrar en adopción algún ejemplar de esta raza inmortalizada por Miguel de Cervantes. También existe la posibilidad de dirigirse a asociaciones como Galgos sin Fronteras, en Madrid, o SOS Galgos, en Barcelona, que, además de a la adopción, también se dedican a busar un hogar a galgos y podencos españoles en otros países donde los aprecian mucho más.

No hay comentarios: