En perras y gatas sin esterilizar es relativamente frecuente la aparición de embarazos psicológicos, también conocidos como falsa preñez o pseudogestación. Se trata de una alteración hormonal que suele acontecer tras producirse un celo en el que no ha habido fecundación y que reproduce las alteraciones típicas de una gestación: las mamas se hinchan e incluso segregan leche, el vientre se abulta, el comportamiento y la personalidad del animal se ve alterada, incluso puede adoptar otro animal o un juguete y tratarlo como si fuera un cachorro. Los síntomas varían en intensidad dependiendo de cada animal y no tienen porqué manifestarse todos.
La única solución. Se trata de una alteración grave que no conviene tomarse a broma, ya que puede acabar causando serios daños físicos al animal: quistes, tumores mamarios, problemas renales... En cuanto se perciban los primeros síntomas hay que acudir al veterinario, ya que la única solución definitiva es la esterilización. Que la perra o la gata tenga una camada no supondrá más que un alivio momentáneo, en próximos celos pueden volver los embarazos psicológicos.
3 comentarios:
que a mi perra cuando le ocuure eso le tenemos que dar en la como da peregil y se le pasa.
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